Encuentro primera generación de Zootecnistas U.N.
Imagen 1. Fotografías del evento
Fuente: Ingrittis Marcela García
Imagen 2. Fotografías del evento
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Fuente: Ingrittis Marcela García
Imagen 4. Fotografías del evento
Fuente: Ingrittis Marcela García
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Fuente: Ingrittis Marcela García
Por: Yudy Andrea Sánchez
Coordinadora Programa de Egresados
Facultad de Medicina Veterinaria y de Zootecnia
Hacia 1966 en la Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá, se dio inicio a un programa específico de formación profesional en la rama de la zootecnia. Por ello, la celebración de la Semana de la Zootecnia, el pasado mes de octubre (del 10 al 14), era también propicio para celebrar los 50 años de los primeros egresados.
Como lo recuerdan muchos de aquello que, entonces, optaron por una formación tan específica, no era fácil decidirse por una profesión cuyos roles de desempeño no eran completamente claros y que debían acudir a la tutoría y orientación de profesores que, como en los casos del profesor Abadía o Morales, partían de conceptos y teorías de raíz veterinaria. Así que aquella opción constituía una especie de aventura, de apuesta por ir colonizando un qué hacer y un acumulado de destrezas, conceptos, teorías y enfoques. Sin aquellos pioneros-aventureros, tanto estudiantes como maestros, que tuvieron el ímpetu para jugar a esa apuesta, no hubiera sido posible lo que hoy es el posicionamiento de la zootecnia, la cual disputa el ser una carrera estratégica para el desenvolvimiento del campo Colombiano. Ese fue el reconocimiento que, en la tarde del miércoles 12 de octubre, se quiso hacer a aquellos, maestros y estudiantes, de finales de los años 60, pioneros de esta nueva pero a la vez cincuentona profesión.
Tras una tesonera labor de revolcar archivos y, sobretodo, de esculcar en agendas viejas, tras marcar este y aquel teléfono preguntando si el destinario era el que fue hace 20 años y si ese destinario conocía del teléfono de otros compañeros de hace 40 o 45 años, con muchas omisiones, pues no se pudo contactar a todos aquellos que merecían ser convocados y ser partícipes de ese reconocimiento; finalmente, se consiguió reunir a un selecto grupo de más de 40 personas entre profesores y alumnos de aquella generación colonizadora.
El propósito era claro y único, agradecerles por los riesgos que asumieron, por su tesón y por su perseverancia para lograr el empoderamiento de la zootecnia. Y teniendo en cuenta que lo que se pretendía era que estos grandes personajes de la zootecnia se sintieran muy especiales por lo que hicieron y por quienes son, el acto debía estar matizado de evocaciones y nostalgias. Dejando que los recuerdos de los propios protagonistas fueran los que erigieran el monumento y exaltaran el sentido de aquella aventura, nos reunimos para mirar hacia atrás, para recordar, para recaer en el abrazo que, entonces, no tuvimos el impulso para dar, para explicitar el agradecimiento que se tenía atenazado durante décadas, para ya exhibir con desparpajo las lágrimas que antes se ocultaban.
El escenario no podía ser otro que las propias instalaciones del Departamento de Producción de la Facultad de Medicina Veterinaria y de Zootecnia (FMVZ), improvisado como salón de ceremonias para aquella exclusiva tarde. Los quesos degustados, los vinos compartidos, las carnes consumidas no fueron otras que el resultado de las prácticas de los estudiantes de último semestre en las instalaciones del Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos (ICTA).
Las voces que se escucharon, los aplausos que se arrancaron y los reconocimientos que se solicitaron fueron los que, espontáneamente, requirieron cada uno de los más de 30 interlocutores que, entre los maestros y alumnos de hace tantos años, tomaron el micrófono para dejar testimonio de que aquí estaban presentes, siempre orgullosos de la profesión que les había legado el alma mater. Entre tanto, los actuales profesores y varios de los estudiantes de las nuevas generaciones, fungiendo de espectadores, aparentemente al margen, pero que, sin poder contener las lágrimas, fueron testigos de aquel emocionante encuentro de los egresados de finales de los años 60.
Este tan especial acto resulto de la convergencia de propósitos de la decanatura de la FMVZ de la UN, de la Asociación Colombiana de Médicos Veterinarios y Zootecnistas de Colombia (ACOVEZ) y de la Asociación Nacional de Zootecnistas (ANZOO). A más del aliento de COMVEZCOL y de esa cascada de remembranzas, que de verdad arrancaron torrentes de lágrimas, como una parte adicional del acto, se hizo el reconocimiento de la trayectoria profesional y docente de los profesores Humberto Vásquez, Daniel Abadía, Hernán Morales y de los zootecnistas Dra. Luz Delia Rico, Dra. Teresa Carvajal, Dr. Abelardo Conde, Dr. Luis Antonio Cuadros, Dr. Roberto Fajardo, Dr. Ignacio Amador, Dr. Nelson Guerrero, Dr. Fernando Rodríguez, Dr. Jesús Baldrich, Dr. Juan José Escobar, Dr. Enrique Ortega y Dr. Carlos Maldonado.
Gracias a todas estas memorias este sencillo encuentro se caracterizó por un toda una mezcla de emociones, las cuales devinieron en una especie de abrazo colectivo, donde se dejó testimonio de los egresados que participaron de tan emocionante rito y quienes, con su presencia, dieron abrigo a las instalaciones del Departamento de Producción Animal, el pasado miércoles 21 de octubre.